A los valientes

           Compañeros del Servicio Aéreo de Rescate: Una estela de gloria cubre el cielo y besa el mar en los confines del orbe donde se quebraron vuestras alas, en cumplimiento del sagrado deber de ayuda a cuantos os necesitaban. siempre estaréis con nosotros, especialmente en nuestras oraciones de esta Semana Santa.

Al Capitán Valiño
A la Teniente Ortega Cortés

Al Sargento Caramanzana Álvarez
Al Teniente Ruiz Galván

         Donde quiera que estéis, con este breve poema en vuestro honor y con lágrimas de la Madre que os vio nacer, España, hoy os cubre con su bandera para no olvidaros nunca. 

El último beso

      Con la mochila llena de ilusión

ingresé en la aviación gloriosa,

soñada vocación noble y hermosa,

orgullo de tan digna profesión.

         La doctrina es  honrada condición,

honor y lealtad guarda celosa,

sublimada en la entrega más dichosa,

jurando a la “Bandera” adoración.

       Compañero del alma y promoción,

tú bregaste conmigo en la quimera,

hicimos del honor fiel religión.

     Si los vientos me quiebran la ilusión,

acerca a mis labios la “Bandera”,

¡Díle al cielo por mí nuestra oración!:

 ¡Viva España! ¡Gloria la Aviación!

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Tte. del Ejército del Aire: Blanco González